KATHERIN SALINAS RODRIGUEZ

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COMÓ NOS VENDEN LA MOTO

Al iniciar la lectura del libro el autor Chomsky, no se hace esperar ni un párrafo para entrar a evaluar lo que por siglos nos han vendido como democracia y libertades, que no es más que simplemente corrernos la cerca para que la sociedad que en su porcentaje es la mayoría es catalogada como “el rebaño desconcertado”, el cual debe ser domesticado para no correr riesgo alguno  que se percatara de la realidad y quisiera en algún momento tomar partido en los intereses comunes de la sociedad y de esta manera no dejar actuar a “la clase especializada de hombres responsables” que no son más que personas títeres de los verdaderos dueños de la sociedad a quien les deben rendir cuentas de su gestión. Es apenas obvio que para ellos priman los intereses propios  en donde su prioridad esta en continuar siendo los dueños del sistema financiero y tener el poder para seguir adquiriendo  y monopolizando los medios de comunicación.

Durante la lectura nos van evidenciando,  que este hecho ha venido ocurriendo y no es solo en la actualidad debido a las nuevas tecnologías… que estemos siendo víctimas de tanta manipulación, hasta el punto de suministrar de la manera más sutil toda nuestra información, gustos, preferencias etc.  Ahora bien como dice el refrán el que tiene la información tiene el poder, entonces imagínese lo que hacen y hasta que punto llegan y pagan por obtener esas bases de datos que en manos de expertos le sacan el mayor provecho no solo económico, social sino hasta político, lo cual  representa miles de millones de pesos que ingresan  a sus economías y lo logran con un excelente manejo de masas,  inicialmente por las propagandas y ahora por las Tics, cuyo objetivo es incentivar a un pueblo a consumir cada vez más.

La responsabilidad ha sido siempre nuestra, por cederle ese poder y peso a alguien más, buscando permanecer en el confort de no tener que preocuparnos por velar por aquello que representa nuestros intereses. Es por eso que toda voz o grupo que ese alce es marginado o callado sin importar la fuerza o la violencia  que deban aplicar, esto lo hacen porque  son vistos como una  gran amenaza, para la armonía y paz del estado ciudadano, por lo que caemos en la trampa de creerle a ciegas en los medios de comunicación que por medio de la propaganda desinforman y distorsionan la realidad. De ahí que toda la información se entrega de una manera disgregada para que de esta forma no quede otra opción que creer y así evitarse el cuestionamiento de  todo el público.

Es nuestro deber o por lo menos tratar de darle el mejor uso a las herramientas tecnológicas, clasificar  los medios y lo que consumimos en nuestra vida diaria, parece una tarea ardua por la cantidad y la inmediatez de “información” con la que somos bombardeados en cada segundo, que finalmente de eso se trata, ya que de no ser así tendríamos más tiempo de analizar, pensar y ponerlo todo en tela de juicio, por lo que esta nueva forma de hacer propaganda resulta cada vez una manera más fácil, segura y efectiva para lograr llevar los hilos a los resultados que se trazan, obteniendo resultados muy satisfactorios para quien nos rige.